Santo Domingo, R.D. — La prohibición de estacionamiento en la emblemática calle Las Damas, implementada por el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), generó controversia este viernes entre residentes y visitantes de la Zona Colonial.
Desde este miércoles, agentes de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) han estado fiscalizando y movilizando vehículos estacionados en esta vía, considerada patrimonio histórico. Sin embargo, voces como la de Alfredo Montero, residente y propietario de un inmueble en la calle Las Damas desde 1961, denuncian el impacto de la medida en la vida cotidiana de quienes habitan y trabajan en el lugar.
"No es justo. A mi edad, no encuentro dónde estacionar. Llevo más de 60 años en esta calle y siento que nos están sacando poco a poco", expresó Montero, visiblemente molesto.
Aunque algunos ciudadanos apoyan la idea de despejar la zona para preservar su valor histórico, otros cuestionan el momento de su implementación. Argumentan que, con varias calles cerradas por trabajos de remodelación, la falta de estacionamientos ha afectado a los negocios locales y ha desincentivado el turismo.
"Es una buena iniciativa, pero está mal ejecutada. Sin estacionamientos disponibles, muchos clientes dejan de ir a los negocios de la zona, lo que significa pérdidas", señaló un comerciante.
Además, varios ciudadanos han manifestado que los nuevos estacionamientos en construcción deben ser gratuitos para compensar las restricciones actuales, una propuesta que aún no ha sido respondida por las autoridades.
Mientras tanto, la Digesett continúa con los operativos de fiscalización para cumplir con la normativa que restringe el estacionamiento en la histórica vía. Las autoridades aseguran que la medida busca mejorar el tránsito, la seguridad peatonal y la imagen del centro histórico, aunque para muchos, el cambio llega sin el acompañamiento logístico necesario.
La disposición es parte del plan de reorganización vial que impulsa el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant) como apoyo al remozamiento de la zona.
Con la Zona Colonial en plena transformación urbana, el desafío sigue siendo encontrar un equilibrio entre la preservación del patrimonio y las necesidades reales de movilidad de sus usuarios.