SANTO DOMINGO.-La Oficina Judicial de Atención Permanente del Distrito Nacional aplazó para el lunes la audiencia de medidas de coerción contra el teniente coronel de la Policía Nacional, Raúl Francisco Suriel Arias, acusado de matar al joven Gregory Mena Montero en el sector Los Ríos, del Distrito Nacional.
El abogadode los familiares de la víctima, Tomás Castro, precisó que el Ministerio Público no presentó entre las pruebas los videos que circularon a través de las redes sociales, sin embargo, indicó que el órgano acusador envió el material al Departamento de Investigación de Crímenes y Delitos de Alta Tecnología (Dicat) y al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) para evaluar la secuencia de las imágenes y así tener visos legales.
"Nosotros no tenemos problemas con eso. Ahora bien, vamos a aportar los videos y la información policial que indica que la víctima le emprendió a tiros y que estaba armada con un arma de fuego calibre 380″, indicó el abogado, quien además afirmó que los policías utilizan armas de fuego ilegales en sus operaciones para hacer creer que pertenecen a la víctima.
El día de los hechos, ocurrido el pasado 15 de diciembre de 2024, tres agentes participaron en la intervención. Sin embargo, no figuran en el expediente acusatorio, ya que las autoridades determinaron que la bala que causó la muerte del joven, de 28 años, fue disparada por el teniente coronel. Además, los videos que circularon en las redes sociales lo muestran a él golpeando al joven.
Hasta el momento, la información que han ofrecido las autoridades es que el incidente ocurrió durante una persecución policial automovilística que desencadenó en la tragedia.
Gregory, a bordo de una camioneta todoterreno, era seguido por una patrulla policial, con al menos cinco agentes, desde el capitalino sector Cristo Rey y, al llegar a una estrecha calle del barrio La Esperanza de Los Ríos, fue interceptado por miembros de la unidad policial, sacado de su vehículo por uno de ellos, quien posteriormente lo ejecutó de un disparo.
El joven, descrito por su familia como un "químico" dedicado a la elaboración de productos de belleza y limpieza, residía en la avenida Los Próceres, cerca del sector Los Ríos.
Su muerte, captada en video, generó conmoción en la sociedad dominicana. En las redes sociales, numerosas personas condenaron el accionar de los agentes policiales.
La víctima dejó en la orfandad a dos hijos, uno de tres años y otro de apenas un año. Fue sepultado el martes.