Santo Domingo. -Los residentes del sector Las Lilas, ubicado en las márgenes del río Ozama, enfrentan sentimientos encontrados ante la posibilidad de ser desalojados de sus viviendas.
Mientras algunos ven la medida como una oportunidad para dejar atrás los riesgos e incertidumbres que enfrentan cada vez que llueve, otros temen perder sus propiedades y enfrentarse a un futuro incierto.
"Es difícil vivir con el miedo de que la casa se inunde o que la crecida del río arrase con todo, un desalojo sería lo mejor", expresó Camilo Hernández.
Sin embargo, no todos comparten el mismo optimismo. Familias como la de Camilo Hernández, temen que el proceso no contemple soluciones habitacionales adecuadas. "No sabemos si nos van a dar un lugar digno para vivir o si simplemente nos van a dejar a nuestra suerte”.
El presidente de la junta de vecinos del sector, Andrés Ruiz, reconoció las difíciles condiciones en las que viven muchas familias y subrayó la necesidad de que el desalojo se lleve a cabo de manera respetuosa y organizada.
"Sabemos que este no es el mejor lugar para vivir, pero esperamos que las autoridades garanticen nuestros derechos y nos ofrezcan alternativas seguras y dignas", afirmó.
El sector La Lila se ha mantenido como una de las zonas vulnerables ante fenómenos naturales, lo que ha llevado a las autoridades a considerar acciones para reubicar a sus residentes. Sin embargo, los detalles del plan de desalojo y las medidas de reubicación aún no han sido comunicados, dejando a los vecinos en una mezcla de esperanza y preocupación.
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